Los jarrones franceses tienen un aspecto decorativo y son un verdadero punto de atracción en cualquier jardín, especialmente al final de caminos y senderos. Las elegantes curvas y el acabado suave en el tallo y el borde realmente llaman la atención. Los jarrones se utilizaron por primera vez durante la época romana y se reintrodujeron durante el Renacimiento. Su forma clásica es una maravillosa pieza atemporal para cualquier jardín. Cada urna de hierro fundido ha sido fundida a mano según la tradición y la artesanía ancestrales.
Material: Hierro fundido
L 13.8 x D 13.8 x H 14
1,651 kg